Actos y banderas. Arriba, el homenaje republicano de Lena. A la izquierda, el Ayuntamiento de Mieres, con la bandera republicana en el balcón y otra de España en una ventana.

Pola de Lena, C. M. B. No tienen tumba. Algunos, ni siquiera nombre. El Ayuntamiento de Lena inauguró ayer un monumento en el barrio de Santa Cristina de la Pola para recordar siempre a las más de seiscientas personas que, según los testimonios orales, perdieron la vida o desaparecieron durante la Guerra Civil y el franquismo. Al acto acudieron, emocionados, algunos familiares de víctimas que respiraron aliviados por tener ahora un lugar donde llorar a los suyos. Encabezaron el acto -organizado por el 85.º aniversario de la II República- el alcalde, Ramón Argüelles (IU), el director general de Justicia e Interior, Rafael Abril y el presidente de la asociación de Memoria Histórica en Lena, Rafael Hevia Rodríguez.

Entre el público, más de un centenar de personas. Muchos eran familiares de desaparecidos, como Juan Manuel Fernández. «A mí me mataron a mi tío, Ramón Fernández», explicó, emocionado. Lo cogieron en un bar de Campomanes y lo llevaron hasta Vegadiello. Cuando la familia fue al día siguiente a llevarle algo de comer, les dijeron que «ya había desayunado». Ya estaba muerto. «No supieron más de él». Así terminan las historias que se cruzaron ayer en la inauguración del monolito. Como la de Plácido Fernández, que relató su sobrina Angelita. También lo apresaron en Campomanes. «Nos contaron que lo habían corado (degollado)», afirmó la mujer. Son historias que los responsables locales y municipales no quieren que se pierdan. Es por eso, anunció Rafael Abril, que el Principado está trabajando en la actualización del mapa de fosas que elaboró la Universidad de Oviedo y en la localización de enterramientos. El PSOE de la comarca convocó su propio homenaje, con ofrendas florales en el Pozu Fortuna, La Pola, La Foz y Mina Peregrina en Aller.

El aniversario de la II República fue especialmente colorida en el Ayuntamiento de Mieres, gobernado por IU. Del balcón se colgó una bandera republicana y en la ventana del despacho del PP se colgó la actual enseña constitucional en respuesta.