mapas de fosas, leyes de memoria y consejos regionales.
FAMYR CONSIDERA QUE CUALQUIER NORMATIVA QUE APRUEBE EL GOBIERNO DE ASTURIAS EN MATERIA DE MEMORIA HISTORICA PARA SER UTIL DEBERIA AJUSTARSE A LO QUE ESTABLECE EL DERECHO INTERNACIONAL CONTRA CRÍMENES CONTRA LA HUMANIDAD.
TAMBIEN PLANTEA QUE EL FUNCIONAMIENTO DE UN CONSEJO REGIONAL DE LA MEMORIA SE DISCUTA PREVIAMENTE CON LAS ASOCIACIONES MEMORIALISTAS Y REPUBLICANAS Y QUE SU COMPOSICIÓN DEBESER AMPLIA Y PLURAL, SIN DEJAR FUERA A NINGUNA DE ESTAS ORGANIZACIONES.
Ante las últimas declaraciones del Viceconsejero de Bienestar Social, Ángel González, sobre la aprobación de una normativa autonómica sobre Memoria Histórica y la posible creación de un Consejo Regional de la Memoria, la Junta Directiva de la FEDERACIÓN ASTURIANA MEMORIA Y REPUBLICA (FAMYR) quiere hacer publica el siguiente posicionamiento:
1. FAMYR lamenta el retraso con el que medidas de este tipo llegan, cuando está terminando la legislatura, y espera que sean fruto de un posicionamiento sincero y no de una promesa electoral más que se hace en vísperas de las próximas elecciones autonómicas y municipales, de esa que suelen quedar en nada cuando entran en juego los acuerdos para configurar mayorías de gobierno.
2. FAMYR no ve con malos ojos una normativa asturiana de ese tipo, pero considera que para que ello sea útil debe tener rango de ley, aprobada en la Junta General del Principado, y no de un mero decreto gubernamental, y sobre todo que se ajuste a la normativa del derecho internacional, en particular en lo que este refleja la obligación de las autoridades públicas de investigar, perseguir y castigar los crímenes contra la humanidad. La normativa autonómica, para que sea compartida por FAMYR, no puede convertirse en una legislación más encaminada a seguir apuntalando el llamado “modelo de impunidad español”, sino que debe conllevar una verdadera implicación de la administración autonómica en la investigación de los crímenes del franquismo y en particular, en cuanto al levantamiento de fosas, someter estas a la intervención de la autoridad judicial de acuerdo con los protocolos de Naciones Unidas que se están aplicando en otros países del mundo, como es el caso de Bosnia. El levantamiento de fosas no puede quedar en manos privadas o en una fuente indirecta de financiación de asociaciones, a través de subvenciones, pues ello implicaría que la memoria histórica podría llegar a convertirse en un negocio y la administración haría una clara dejación de funciones que le tiene encomendadas el ordenamiento jurídico vigente.
3. Dicha normativa también debería implicar articulación de mecanismos jurídicos efectivos de protección tanto de las fosas como de los símbolos de reconocimiento a los luchadores y las luchadoras antifranquistas, para evitar que agresiones y atentados como los sufridos en el monumento sito en Pandiello (Cabrales) se repitan y queden impunes. FAMYR no comparte la actual política de la administración asturiana de señalizar fosas comunes sin protección alguna, pues ello puede, sin quererlo, convertirse en una forma de facilitar la desaparición de pruebas de los crímenes contra la humanidad cometidos por el franquismo.
4. FAMYR ha venido exigiendo desde hace tiempo la constitución del Consejo Regional de la Memoria, pero lamenta que este anunció de la administración autonómica se haga sin haber consultado ni siquiera un borrador de sus funciones, competencias y forma de organizarse con las organizaciones de la memoria, como la nuestra y otras que existen en Asturies. FAMYR cree que el Consejo debe tener verdaderas competencias de propuesta, consulta, asesoramiento e investigación, entre otras, y no convertirse nunca en un mero órgano para repartir subvenciones o para mostrar anuencia a las propuestas que lleguen del gobierno de turno. Asimismo la composición de dicho Consejo debería ser plural, sin exclusiones, para que estén representadas todas las organizaciones del movimiento memorialista y republicano de Asturies, incluida la nuestra. De no ser así, FAMYR es escéptico a la creación de cualquier organismo que pudiera ser inútil como lo son otros muchos de los hoy existentes en la administración autonómica.
5. FAMYR hace un llamamiento a las organizaciones políticas, con representación parlamentaria o no, y a las organizaciones sociales y sindicales, a implicarse en un debate en profundidad sobre el tema de la memoria histórica que permita que en Asturies se corrijan y se superen los errores y deficiencias de la normativa estatal vigente, que se ha demostrado claramente incapaz de ayudar a que las víctimas del franquismo obtengan VERDAD, JUSTICIA Y REPARACIÓN”.
6. FAMYR pedirá, en breve, una nueva reunión a la Consejería de Vivienda y Bienestar Social para hacerle llegar nuestras propuestas directamente, y espera de la misma una receptividad mayor a la que ha tenido por el momento con las exigencias del movimiento memorialista y republicano.
